La elevada carga fiscal, la escasez de fuentes de financiación o la burocracia son las principales preocupaciones de cualquier trabajador por cuenta propia que quiera emprender y montar su propio negocio. Pero no hay duda de que los trámites burocráticos son uno de los mayores problemas que acompañan a las startups y a los emprendedores en todas las etapas de su negocio.

De hecho, según un informe elaborado por Infoempleo y Adecco, casi el 50% de los trabajadores por cuenta propia, considera que la carga administrativa en nuestro país es uno de los mayores problemas a los que se enfrentan. La media de días que lleva establecer una empresa en España es de 12,5 días frente a los 3 días de media en otros países de la OCDE, como es el caso de Dinamarca. A esto hay que sumarle los gastos que esta gestión supone, ya que requiere una inversión mínima de 3.000 euros, en el caso de fundar una sociedad limitada.

Pero más allá de los procedimientos iniciales, si estás pensando en emprender, debes tener en cuenta que al montar una empresa tendrás que hacer frente a un sinfín de papeleo. A continuación vamos a ver algunas de las trabas burocráticas más comunes.

Burocracia, un problema para emprendedores, PYMEs y autónomos

España es uno de los países en el que más tiempo se dedica a la burocracia. Facturas, contabilidad, gestión de impuestos, reclamación de pagos… Son muchos los trámites y gestiones que deben asumir no solo los emprendedores, sino también las PYMEs y los autónomos.

Trámites iniciales y licencias

Para poder ejercer la actividad, todos los negocios deben cumplir con una serie de requisitos legales: elegir la forma jurídica de la empresa, darse de alta en el Impuesto de Actividades Económicas (IAE) y en el IVA, presentar la declaración censal de inicio de actividad o inscribirse en el Registro Mercantil, entre otros.

Una vez constituida la empresa, debes tener en cuenta que abrir el negocio en un espacio físico requiere de una serie de licencias y solicitarlas es un proceso que lleva tiempo. Por este motivo, lo más recomendable es informarse bien sobre la normativa de tu comunidad e iniciar estos trámites con antelación. Ten en cuenta que sin una licencia de apertura aprobada o una licencia de obras, te arriesgas a una sanción que podría suponer la suspensión o el cese temporal de la actividad y clausura del local.

Declaraciones trimestrales y anuales

Las obligaciones fiscales que deben asumir los emprendedores van desde declaraciones trimestrales y anuales de IVA o IRPF, hasta el registro de operaciones en el libro de contabilidad. Para tener bajo control todos estos trámites es necesario llevar un registro minucioso de todas las facturas, los cobros y los pagos.

Recuerda que cualquier atraso o incumplimiento en la entrega de estas declaraciones puede suponer una sanción por parte de Hacienda, lo que a su vez también implica más burocracia.

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No hay duda de que todos estos trámites burocráticos requieren tiempo y recursos, lo que acaba afectando a la productividad, a las ventas y los resultados de las empresas. La solución pasa por automatizar las tareas más repetitivas y que provocan tantos quebraderos de cabeza a los emprendedores, para lo que Jasmin es el mejor aliado.

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